Como el negocio estético que en 1991 creó un carnicero francés, crece la preocupación entre las mujeres que hoy cargan en sus pechos el implante mamario de la empresa Poly Implants Prothèses (PIP).
El pasado viernes, a raíz de un aumento de las denuncias por rotura, el Gobierno francés recomendó a las usuarias retirarlas de manera preventiva "y sin carácter de urgencia", incluso si no muestran deterioro.
Unas 30.000 francesas deberán pasar de nuevo por el quirófano para retirar las prótesis creadas por Jean-Claude Mas, un excarnicero que llegó a posicionar su compañía como la tercera más importante en el mercado mundial.
Los gastos de esta intervención serán cubiertos por el sistema de salud francés -mas no cobijará la nueva prótesis de quienes se hayan hecho la cirugía por razones estéticas-, una ventaja que al parecer no tendrán las 300.000 mujeres de numerosos países alrededor del mundo adonde iban a parar los implantes PIP.
El pasado viernes, a raíz de un aumento de las denuncias por rotura, el Gobierno francés recomendó a las usuarias retirarlas de manera preventiva "y sin carácter de urgencia", incluso si no muestran deterioro.
Unas 30.000 francesas deberán pasar de nuevo por el quirófano para retirar las prótesis creadas por Jean-Claude Mas, un excarnicero que llegó a posicionar su compañía como la tercera más importante en el mercado mundial.
Los gastos de esta intervención serán cubiertos por el sistema de salud francés -mas no cobijará la nueva prótesis de quienes se hayan hecho la cirugía por razones estéticas-, una ventaja que al parecer no tendrán las 300.000 mujeres de numerosos países alrededor del mundo adonde iban a parar los implantes PIP.
El principal destino de las cerca de 100.000 prótesis mamarias que esta empresa producía anualmente era Latinoamérica. Se calcula que en Colombia unas 15.000 mujeres llevan este tipo de implantes, 13.000 argentinas y unas 25.000 brasileñas.
Además de presentar un índice mayor de ruptura, estas prótesis representan un riesgo más alto de inflamación.
"La empresa utilizaba dos productos, un gel de silicona conforme a las normas francesas y otro producto, fabricado por PIP, que no tenía el acuerdo de las normas francesas", reconoció el abogado de Jean-Claude Mas, buscado por la Interpol por conducir ebrio en Costa Rica, prófugo de la justicia francesa y de quien no se conoce su paradero.
"La empresa utilizaba dos productos, un gel de silicona conforme a las normas francesas y otro producto, fabricado por PIP, que no tenía el acuerdo de las normas francesas", reconoció el abogado de Jean-Claude Mas, buscado por la Interpol por conducir ebrio en Costa Rica, prófugo de la justicia francesa y de quien no se conoce su paradero.
El material que desde el 2006 llenaba el 80 por ciento de las prótesis PIP, aparentemente silicona industrial, era 10 veces más barato que el biopolímero aprobado para este uso.
Aunque se han registrado ocho casos de mujeres francesas que han contraído cáncer, el consenso entre los médicos y las autoridades de salud señala que no se ha demostrado una relación entre la prótesis y la enfermedad.
El riesgo, temen los especialistas, es que este polímero cree masas de silicona difíciles de retirar o alcance los ganglios linfáticos, lo que generaría dolor, hinchazón y una intervención quirúrgica adicional.
Por el momento, la recomendación del Invima es consultar al médico y mantener una vigilancia constante de la prótesis para verificar que esta continúe íntegra.
En primer lugar, por medio de ecografías, una prueba "fidedigna" según Juan Hernando Santamaría, presidente de la Asociación Colombiana de Cirugía Plástica, o a través de una resonancia magnética nuclear. Esta última, en palabras de Santamaría, "la prueba reina".
Aunque se han registrado ocho casos de mujeres francesas que han contraído cáncer, el consenso entre los médicos y las autoridades de salud señala que no se ha demostrado una relación entre la prótesis y la enfermedad.
El riesgo, temen los especialistas, es que este polímero cree masas de silicona difíciles de retirar o alcance los ganglios linfáticos, lo que generaría dolor, hinchazón y una intervención quirúrgica adicional.
Por el momento, la recomendación del Invima es consultar al médico y mantener una vigilancia constante de la prótesis para verificar que esta continúe íntegra.
En primer lugar, por medio de ecografías, una prueba "fidedigna" según Juan Hernando Santamaría, presidente de la Asociación Colombiana de Cirugía Plástica, o a través de una resonancia magnética nuclear. Esta última, en palabras de Santamaría, "la prueba reina".
La lista de países con más procedimientos de cirugía estética cosmética según la Sociedad Internacional de Cirugía Plástica Estética (ISAPS) en un informe dado a conocer en Bogotá, está encabezada por los Estados Unidos está en el primer puesto de la lista, seguido de Brasil, China, India y Japón. México (puesto 6), Colombia (10), España (13), Venezuela (17) y Argentina (19) están entre los 20 países del mundo donde más procedimientos estéticos, quirúrgicos y no quirúrgicos.